Gobierno de Guerrero retiene toneladas de despensas para damnificados
Denuncias ciudadanas en Chilpancingo revelaron un almacén con toneladas de despensas entre ratas, mientras la Montaña Guerrero enfrenta crisis alimentaria
Toneladas de despensas entre las ratas,mientras Guerrero sigue hambriento. Foto: Flor Miranda
*** Damnificados, líderes de la APPG y reporteros irrumpen al almacén que ya estaba siendo desinstalado por trabajadores del DIF
*** En la Montaña, Sierra y Tierra Caliente, damnificados hambrientos y desamparados
Por Flor Miranda
CHILPANCINGO, Guerrero.- Mientras miles de damnificados en La Montaña, Tierra Caliente, Costa Grande y Región Centro del Estado siguen pidiendo ayuda al menos para comer, en uno de los almacenes del DIF estatal permanecen guardadas cientos de toneladas de ayuda en especie enviada desde otros estados, universidades, agrupaciones cristianas e incluso personajes famosos y partidos políticos.
Esto pudo ser corroborado por reporteros de Chilpancingo, a quienes el gobierno estatal les envió policías como respuesta a su labor de informar, en tanto, aunque no se dijo oficialmente, se supo que la Procuraduría del Estado abrió averiguación previa en contra de Nicolás Chávez Adame, líder de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero (APPG) que acompañó a los periodistas y algunos damnificados a corroborar el hallazgo.
Desorden y suciedad entre las despensas retenidas por el gobierno. Foto: Flor Miranda
Entre las ratas…
El lugar habilitado como almacén se ubica en la colonia Jardines del Sur justamente a espaldas del almacén estatal. Ahí eran antes las oficinas de esta dependencia estatal. Adentro, quien camina lo hace entre un mar de artículos desde ropa, agua, papel higiénico, pero principalmente alimentos en varios de los casos, ya descompuestos.
Al menos 100 trabajadores de la dependencia trabajaban a marcha forzada este miércoles para empaquetar los artículos y formar despensas que desde tempranas horas eran subidas a varios tráiler.
Sin embargo, desde el pasado martes se supo -gracias a denuncias ciudadanas- que ese sitio estaba repleto de despensas que tendrían que haberse entregado a los miles de damnificados en Guerrero tras las tormentas que devastaron la entidad los días 14, 15 y 16 de Septiembre.
Precisamente por eso, varios trabajadores del DIF fueron enviados a empaquetar las despensas, pues según algunos vecinos, antes de que se sacara a la luz pública la información, nadie trabajaba con esos artículos.
Cientos de despensas ya habían sido empaquetadas pero aún la gran mayoría estaba sobre el suelo, a la intemperie y entre las ratas.
En el lugar hay comida enlatada, granos como arroz, frijol, garbanzo, lenteja, haba, entre otros, así como leche (en su mayoría ya caduca), jugos, agua embotellada, ropa para adultos pero más para niños, cobertores, cobijas, juguetes. También se observaron latas de leche infantil y para bebés, pañales y muchas otras cosas más que hoy necesita la gente de las regiones más pobres y más devastadas en la entidad.
Tan solo la región de la Montaña sufre una crisis alimentaria severa, situación que los motivó a pedirle al Estado su ayuda para abastecer a las familias damnificadas de arroz, maíz y frijol, durante un año y así poder subsistir.
A ellos ningún funcionario estatal ni el propio gobernador que los recibió personalmente, les informaron que había despensas guardadas de las que podían disponer para no morir de hambre.
En la región de la Tierra Caliente cientos de familias siguen desamparadas y en la reciente visita que hizo Laura del Rocío Herrera de Aguirre a esa región, tampoco les informó a los damnificados que había despensas a su disposición, menos se tomó la molestia de trasladar algunas de las almacenadas a esa región.
En estas dos regiones y en la Sierra, los campesinos perdieron sus cosechas, los niños están desnutridos y el trabajo se fue a la baja. La situación en todo el estado es difícil, pero de acuerdo a reportes ciudadanos y de los periódicos y periodistas locales, en estas tres regiones se concentra el mayor problema.
La pobreza y marginación se vino a agravar en septiembre del 2013 cuando tocaron estas tierras diversas tormentas y huracanes. La afectación fue impactante en las regiones mencionadas y en todo momento se quejaron de la falta de apoyo.
Sin embargo, también en Chilpancingo y Acapulco los damnificados han sido humillados hasta llegar al punto de que bajo el argumento de que ya no se les podía otorgar de comer, los albergues han ido cerrando uno a uno.
En el almacén que trabajadores de la dependencia trataron de cubrir con lonas, es posible apreciar una cantidad impresionante de apoyo que la ciudadanía donó y el gobierno no entregó. Ahí las ratas son las afortunadas pues poco a poco han ido comiendo lo que iría dirigido a los damnificados.
Se pudo observar incluso una silla de ruedas para damnificados, artículos de limpieza y de aseo personal. En varios de los paquetes, los donantes ilusionados por poder ayudar a una familia, escribieron mensajes de aliento como: “Dios te ama”, pero nadie los leyó.
Había otros mensajes o frases dedicadas a los damnificados que no pudieron ver, pero también hubo quien con el temor de que sus despensas donadas no fueran entregadas, plasmaron: “esta es una despensa donada, no se vende”.
«No se vende es donación», dice la caja de sopas Maruchan entre lo retenido por el gobierno de Guerrero. Foto: Flor Miranda
La irrupción ¿Un delito?…
Por la mañana diversos reporteros se dieron cita en el almacén para captar imágenes pero se encontraron con el portón cerrado con un grueso candado. Aún así se observaban muchas de las despensas y la carga de tráiler, por lo que cuando los comunicadores grababan video y tomaban fotografías, los trabajadores del DIF taparon con lonas para obstruir el trabajo.
Sin embargo, cerca del mediodía llegaron unos 20 damnificados acompañados por dirigentes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero (APPG) quienes visiblemente molestos por el insulto que les estaban haciendo, empujaron el portón de reja tratando de derribarlo.
El intento no tuvo éxito debido a las grandes cadenas y candados que se habían colocado, sin embargo, con una retroexcavadora algunas personas tiraron el portón.
Entonces tuvieron acceso los damnificados, líderes sociales y reporteros que empezaron a fotografiar todo lo que tenían a la vista.
Se observaba un indeterminado número de despensas, ropa, juguetes y hasta sillas de ruedas, entre muchas otras cosas. Eran cientos de toneladas de víveres y se puede destacar que entre otros donantes además de sociedad civil, había cosas enviadas por el corredor de autos Checo Pérez, por universidades y los gobiernos del Estado de México y Jalisco, empresas privadas e incluso del PRI municipal de Chilpancingo.
Algunos de los trabajadores, molestos por que habían sido descubiertos se enfocaron a fotografiar el rostro de los reporteros que hacían su labor, aunque la gran mayoría parecía entender el abuso del que estaban siendo partícipes y se limitaron a seguir trabajando aclarando que solo tenían órdenes de empaquetar todo.
Ellos mismos afirmaron que hoy fueron enviados con instrucciones de trabajar a marcha forzada, esto, a raíz de que desde el pasado martes se había descubierto el almacén.
Enseguida arribaron al menos 60 policías del Estado que sin agresiones pero con visibles intenciones de intimidar a los comunicadores, ingresaron y se colocaron de forma estratégica cercando el perímetro del lugar. Nadie hizo nada y parecía que solo esperaban alguna orden.
Ninguno de los gendarmes llevaba traje antimotín, solo sus toletes en mano. Quien iba al mando hablaba por teléfono constantemente, motivo por el cual, para evitar confrontaciones, los reporteros decidieron retirarse al igual que los damnificados y líderes sociales.
Tres periodistas llegaron más tardes pero los uniformados ya no les permitieron el paso.
Ayer mismo se tuvo conocimiento de que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) abrió una averiguación previa por los delitos de allanamiento de morada, vandalismo, daños a propiedad ajena y lesiones a los trabajadores del DIF, en contra del dirigente de la APPG Nicolás Chávez Adame.
Sin embargo cabe aclarar que en ningún momento hubo siquiera indicios de alguna confrontación con los trabajadores que incluso continuaron trabajando pese a la presencia de la prensa.
La versión oficial es que estaban «revisando» las despensas que estuvieran en buenas condiciones. Foto: Flor Miranda
La excusa oficial…
El gobierno del Estado convocó a la prensa ayer mismo a las 15:30 horas para ofrecerles una conferencia en torno a este caso, sin embargo misteriosamente fue cancelada de último momento.
Minutos después se distribuyó a los medios de comunicación un comunicado en el que el Sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) afirmaba que en ningún momento se estaban almacenando con fines oscuros las despensas.
Más bien explicó que esas despensas estén en proceso de revisión y empaquetamiento para enviar lo que realmente sirve a los damnificados dependiendo de la región. Es decir, que los víveres serían entregados a los damnificados luego de revisar que estuvieran en buenas condiciones.
Sin embargo, cabe mencionar que entre los alimentos encontrados se corroboró que muchos estaban caducados, a pesar de que el DIF negó que se estuvieran echando a perder. Incluso por la mañana, Ángeles Navarro, directora del DIF-Guerrero negó que existiera este almacén en una entrevista radiofónica y se atrevió a decir que algunas fotografías que ya circulaban en la red, eran fotografías “tomadas con anterioridad”, es decir, se habría tratado de un montaje.
Pero este miércoles los reporteros fueron testigos y captaron en imágenes y video la arbitrariedad que se está cometiendo con tanta indolencia gubernamental. Hace un par de semanas fue cesado de su cargo el subsecretario de Protección Civil del Estado, Constantino González Vargas, luego de que se detectaron decenas de despensas almacenadas que no fueron llevadas en tiempo y forma a las familias necesitadas, pero ahora que pasa con el DIF una situación aún más critica por las enormes cantidades detectadas, se está tratando de excusar el hecho.
Parte de las despensas estaban ya caducadas. Foto: Flor Miranda
Sobre cómo un joven se incorpora al CJNG «para tener una vida mejor»
CIUDAD DE MÉXICO (EFE).- La corrupción en México es una incubadora de criminales que ha visto nacer a personajes como Mauricio Hiram Suárez Álvarez, “El Mawicho”, quien con el objetivo de dar a su hija una vida mejor se convirtió en uno de los criminales más sanguinarios e inspiró el libro “Así nació el diablo”, del periodista Emmanuel Gallardo.
En entrevista, este lunes, el escritor mexicano, que ha tenido que exiliarse del país tras investigar las raíces del narcotráfico en México, explica que este fue uno de los principales hallazgos que obtuvo tras redactar el texto, pensado en un principio como un reportaje.
“Lo que más me llamó (la atención) de todo esto durante este proceso fue darme cuenta de que la corrupción en el aparato de Justicia, en específico de la Ciudad de México, pareciera que es una incubadora de criminales, porque en este proceso de intento de impartir Justicia, pareciera que es algo totalmente simulado”, apuntó Gallardo.
“Así nació el diablo”, detalla, es la historia de Mauricio («El Mawicho»), un joven que con el empeño de darle una mejor vida a su hija se fue a un campo de entrenamiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y tiempo después tuvo la plaza de Puerto Vallarta, Jalisco, en el occidente mexicano.
Años más tarde, «El Mawicho» regresó a capital convertido en un pistolero con experiencia en enfrentamientos armados y traumatizado por los asesinatos, los descuartizamientos y la tortura que él mismo ejerció desde el primer día que llegó al rancho del CJNG a las afueras de Puerto Vallarta.
Ineficiencia de las autoridades
Para Gallardo, la corrupción que existe en el sistema judicial del país ha provocado que muchas personas que son recluidas en un penal vivan castigos, hagan conexiones criminales y se especialicen como delincuentes, por lo que al salir corren el riesgo de convertirse en sicarios.
“La verdadera maldad que existe en la Ciudad de México se arrastra en los penales donde existe la corrupción y se desborda la violencia”, comenta.
En ese sentido, asegura, el libro relata las vivencias de » El Mawicho», quien en el reclusorio aprendió todo lo que le llevó a ser un peligroso criminal, lo que resulta un panorama desesperanzador para la sociedad.
Y es que después de salir del penal, «El Mawicho» asesinó a dos israelíes en la Plaza Artz Pedregal en el sur de Ciudad de México, y tras su detención declaró que cometió el crimen porque esperaba ser nombrado jefe de sicarios.
“No solamente es la historia del Mawicho y la corrupción que cada vez se hace más grande, como una bola de nieve, sino que son varias historias y esta bola de nieve, alcanza todas estas historias”, afirma.
El libro, escrito en forma de reportaje, muestra la verdad en cada palabra, personaje, persecución y sinsentido, que terminan retratando el rostro más real del México de balas y desesperación, según el autor.
“En la primera parte (del libro) yo me encuentro con un muchacho con una preocupación absoluta por su familia, por su gente cercana. Un muchacho que, cuando me despedía de él, decía ‘que Dios lo bendiga’, y cuando lo vuelvo a ver en 2019, a un mes antes de que cometiera lo que cometió, ya veo a una persona traumatizada”, relata.
Gallardo comenta que el seguimiento que dio a «El Mawicho» le dejó un impacto psicológico, por lo que previo a escribir su libro tuvo que tener acompañamiento psicológico.
“Este libro lo que significó para mí fue un proceso largo psicológico, para mí sí, mi familia se rompió, no he visto a mi mamá y a mi papá en tres años”, lamenta.
Estado inoperante
El periodista reconoce que una de las cosas que evidencia su texto es que en México la violencia se ha normalizado llevando a que personas como él tengan que huir del país y no los criminales.
“Eso me hace sentir muy frustrado, me hace sentir muy encabronado (enojado). Esto es una prueba más de un Estado mexicano inoperante, incapaz de proteger a sus periodistas y nos están matando, van 13 periodistas asesinados en lo que va del año, son 13 seres humanos muertos”, lamenta.
Por ello, dice, este libro es un “esfuerzo” por mostrar la realidad en México y poner sobre la mesa la necesidad de encontrar mecanismos que saquen al país de toda esta violencia, “comenzar procesos de paz, porque son urgentes en México”, concluye.
La Fiscalía General de la República (FGR) abrió la carpeta de investigación por la comisión de posibles delitos federales que provocaron el colapso de la mina de carbón en el poblado de Aguijita, ubicada en el municipio de Sabinas, Coahuila, donde quedaron atrapados diez mineros.
De acuerdo con la FGR, se realizan labores de criminalística de campo, fotografía forense, entrevistas de testigos, identidad de propietarios ocupantes de la mina e identificación de los mineros atrapados.
La fiscalía federal recolectó información sobre el registro de los trabajadores ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), así como de las inspecciones que realizó la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) sobre las condiciones laborales de los mineros previo al colapso.
Por su parte, la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, informó que un total de 557 personas, seis perforadoras y 25 bombas sumergibles trabajan para rescatar a los trabajadores atrapados en la mina de carbón en Villa de Agujita que permanecen suspendidos desde el miércoles pasado.
La funcionaria federal explicó que en la zona hay un volumen de extracción de 25 mil 400 metros cúbicos, con un acumulado total de 70 mil 794 metros cúbicos, por lo que continuarán las labores de extracción por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En tanto, los familiares de diez mineros aseguraron que el nivel del agua de la mina disminuyó, por lo que esperan que al no filtrarse nuevamente el agua podrían avanzar las labores de rescate de los mineros y podrían ser recuperados en esta semana si arriban más máquinas.
Diferentes organizaciones internacionales defensoras de los derechos humanos advirtieron que este 2022 podría convertirse en el año más trágico para el periodismo en México, debido a que hasta el momento 13 comunicadores han sido asesinados.
La organización Reporteros Sin Fronteras enfatizó que la tendencia de asesinatos a periodistas en este año ha colocado a México como el país más riesgoso para ejercer el periodismo en el mundo, incluso con una tendencia mayor a los países que están en guerra.
De la misma manera, la organización Artículo 19 también lamentó el clima de violencia que predomina en México para el ejercicio del periodismo, ya que existe una incertidumbre sobre las condiciones en las que laboran los comunicadores en diferentes regiones del país afectadas por el crimen organizado.
Asimismo, la organización Human Right Watch también sostuvo que el Estado mexicano no ha garantizado condiciones de seguridad para el pleno ejercicio del periodismo en el país, pues predominan condiciones de abandono por parte de las autoridades municipales, estatales y federales con un mecanismo de protección que ha sido deficiente para su atención.
También la organización Amnistía Internacional (AI) mencionó que el ejercicio del periodismo es fundamental para la construcción de sociedades democráticas, por lo que los ataques a estas organizaciones inciden en derechos humanos fundamentales como la libertad de expresión y de prensa.
En lo que va de este año, en México un total de 13 comunicadores han sido asesinados en el país, los cuales en su mayoría permanecen en la impunidad, mientras que desde el 2000 han sido ejecutados más de 165 profesionales de la información.